Estudio de lavado: la aspersión

Estudio de lavado: la aspersión En este post vamos a…

Estudio de lavado: la aspersión

En este post vamos a prestar atención a los procesos de lavado para que sean óptimos según cada caso. El artículo se centra en la aspersión, siendo uno de los puntos más importantes en el estudio de lavado.

ASPERSIÓN

La elección de los eyectores o boquillas que deben utilizarse para la aspersión de agua y producto químico en cada sistema en singular, es una cuestión de gran importancia. De ello dependerá el caudal y presión de agua con la que se pueda rociar las paredes y superficies del objeto a lavar.

La distribución y diseño de los aspersores se realizará según las necesidades del propio equipo. Y en función de si se trata de un sistema de lavado mediante alta presión o por frotación como, por ejemplo, con cepillos. En este último caso, es habitual que las boquillas se distribuyan en dos circuitos por cada cepillo:

  • CIRCUITO 1: Humidificación cepillo
  • CIRCUITO 2: Actuación sobre superficie

Si la obra y el sistema lo permite, ambos circuitos se distribuirán desde una misma tubería, cubriendo diferentes zonas según el ángulo de las mismas.

La boquilla pulverizadora transforma la energía de presión total de un líquido en energía cinética. Esta última es utilizada para atomizar el líquido en pequeñas partículas y distribuirlas uniformemente de acuerdo con la geometría deseada.

En ciertos casos, la energía cinética es utilizada para conferir al líquido una mayor penetración. En otros, la boquilla permite obtener un caudal variable en función de la presión. La cual se puede fácilmente calcular gracias a diferentes tablas.

CAUDAL

El caudal se determina por el diámetro interno de paso así como por la presión ejercida.

En general la relación entre el caudal y la presión es la siguiente:

Siendo Q1 y P1, el caudal y la presión conocidas. Q2 es el caudal resultante en función de la presión escogida P2. Todas las tablas tienen como dato constante el fluido que pasa: agua.

Para los líquidos cuya densidad especifica es distinta de 1, es preciso multiplicar por los factores de conversión indicados en la tabla inferior:

TIPOLOGÍA DE BOQUILLAS

En el mercado se dispone de una amplia gama de boquillas que permiten resolver cualquier problema de pulverización. Con el fin de poder clasificarlas, se pueden describir todas ellas en las siguientes categorías principales:

En el diseño de cualquier equipo de limpieza habrá que tener en cuenta cual es la tipología de boquilla más adecuada de modo que el caudal, presión y pulveración sean las idóneas para el objeto o vehículo a lavar.

ÁNGULO DE ASPERSIÓN

El ángulo de aspersión es medido generalmente cerca del orificio. Aumentando la distancia de medición, se pierde precisión a causa de la gravedad y de las condiciones ambientales. Es conveniente igualmente saber que un aumento de la viscosidad del producto reduce el ángulo de aspersión.

En la tabla siguiente se indica las coberturas teóricas a diferentes distancias en función al ángulo de aspersión.

IMPACTO

La fuerza de impacto de una pulverización depende principalmente del caudal, de la presión y de la forma del chorro. Los impactos más importantes se obtienen con las boquillas de chorro rectilíneo y de chorro plano, y las más débiles con las boquillas de cono lleno y cono vacío de gran ángulo de aspersión.

Si tienes alguna duda sobre el estudio de lavado, y más concretamente sobre la aspersión y todos sus ámbitos, no dudes en contactar con Domo Medioambiente.

Similar Posts

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *